Pi & Palala es una historia sobre la migración y la amistad, que ayudará a nuestros hijos a desmontar prejuicios. Esta historia se inspiró en la familia de la autora y en sus propias vidas.
La periodista y emprendedora Soraya Romero presenta una historia que rompe barreras, dirigida a los más pequeños.
Los niños nacen sin prejuicios. Afortunadamente, no tienen una idea preconcebida de lo que significa ser diferente. Valiéndose de esta premisa, Soraya Romero ha escrito una historia de aceptación y amistad basada en su propia experiencia familiar. Pi & Palala es el relato de un pájaro y una ternera, tan distintos como capaces de interactuar y trabar una amistad sólida a pesar de sus llamativas diferencias.
Editado en formato cuento, Pi & Palala está disponible en tres idiomas: castellano, alemán y francés, y ha visto la luz gracias al empeño de su autora, que ha apostado por la autoedición independiente. Los dibujos que ilustran esta historia dirigida a los más pequeños son obra de Carla Álvarez García, una niña de 11 años llena de talento, que ha puesto color e imaginación en las 46 páginas que dan forma al libro.
La historia de Pi & Palala incluye un Cuaderno de Actividades para los más pequeños.
Sobre la autora:
Soraya Romero (Madrid, 1983) es periodista y emprendedora. Dirige y presenta el magazine "Enlazados" en la sintonía de Radio RaBe y se define como viajera y hedonista incansable. Inmersa en numerosos proyectos, recientemente ha colaborado con Radio Nacional de España en la edición veraniega del programa 'No es un día cualquiera' ilustrando las diferencias entre la vida cotidiana de su país natal y su país de acogida.
Actualmente reside en Berna, Suiza, donde hace un par de años fue madre de un niño que crece y aprende en tres idiomas, con padres de distintas nacionalidades y una curiosidad libre de estereotipos sobre la apariencia externa y el estilo de vida de los demás.
Con el lanzamiento de Pi & Palala asume los riesgos de la autopublicación, convencida de los valores de este proyecto. Un proyecto basado en la diversidad, la interculturalidad y el respeto al otro.
«Cuando mi hijo tenía un año y medio comenzó a decir, de manera muy repetitiva, lo que creíamos que era una palabra: Pipalala. Aunque su padre y yo tratábamos de buscar algo que se asemejase a eso que repetía insistentemente en tono cantarín, no lográbamos descifrar qué quería decir. Nos dimos por vencidos y llegamos a la conclusión de que se lo había inventado. Meses después, a punto de celebrar su segundo cumpleaños y con la anécdota aún en mente, pensé que sería bonito escribir un cuento en el que esa palabra contara la historia de nuestra familia. Así nacieron Pi y Palala».