«Esta es la historia de una mujer sensata que, cuando se dio cuenta de que todo lo que le habían contado era mentira, fue al juzgado, denunció los hechos y lo puso todo patas arriba».
Hace casi veinticinco años, Nevenka Fernández, concejal de Hacienda de Ponferrada, dimitió y acusó al alcalde, Ismael Álvarez, de acoso sexual. Sin embargo, el valor para contar públicamente lo que estaba sufriendo en silencio no tuvo un efecto lógico: la justicia falló a su favor y el acusado se vio obligado a renunciar su cargo, sí, pero ella fue sometida a un juicio público y mediático paralelo que acabó forzándola a abandonar el país.
A partir de entrevistas con la protagonista y del seguimiento del proceso judicial, Juan José Millás narra en Hay algo que no es como me dicen la crónica de este caso real -hoy todavía vigente- de lucha contra el machismo, e investiga los mecanismos por los que alguien se convierte en víctima y sin embargo logra hacerse con los recursos internos para salir de esa situación.
EL LIBRO EN EL QUE SE INSPIRA LA PELÍCULA DE ICÍAR BOLLAÍN SOY NEVENKA
Reseñas:
«Millás conjuga voz y mirada para iluminar los múltiples repliegues de la realidad». Ana Rodríguez Fischer, Babelia
«Para no hacerlo sentir incómodo, finjamos que Millás no es uno de nuestros mejores escritores». Sergi Pàmies, La Vanguardia
«Juan José Millás es dueño de un territorio fantástico de incuestionable personalidad». J. Ernesto Ayala-Dip, El País
«Mima y seduce [las palabras] hasta hallar ese hueco de silencio que se esconde tras ellas». Elena Hevia, El Periódico
«Millás tiene la capacidad de ver donde otros no alcanzamos ni siquiera a vislumbrar nada». César Coca, El Correo
«La escritura de Juan José Millás, el Buster Keaton de nuestra literatura, es única e inimitable». J. A. Masoliver Ródenas, Cultura/s (La Vanguardia)
«Una mirada transgresora y llena de sutileza que transforma la realidad, la reinterpreta y la ficcionaliza». Iñigo Urrutia, El Diario Vasco
«Millás derriba el mundo y descubre su trastienda, se pierte con la demolición, aunque describa el triste escaparate de los días. Millás, está claro, sigue siendo un maestro». Saúl Fernández, La Nueva España