Como cuando las paredes oyen a los amantes, esta nueva obra del autor de La lengua de las Mariposas y El Lápiz del Carpintero no huye de la realidad sino que reclama más y más: ¡Más realidad!. Son relatos que se rebelan contra la fatalidad. En ellos surgen siempre personajes que luchan, cuerpo a cuerpo, contra la adversidad y la tristeza. Se hacen fuertes con su brizna de esperanza, con sus puñetazos de humor e ironía.